Los papis festejan, se vienen tarifazos en escuelas privadas

Así lo dispuso el gobierno nacional, vía Secretaría de Comercio, al liberar el mercado dejando desprotegida a la gente de bien

Los festejos electorales parecen extenderse. Al envión logrado por un muy buen caudal de votos obtenidos por el gobierno de La Libertad Avanza (Milei) con el acompañamiento de Juntos por el Cambio, para que el mismo no decaiga ahora se le acaba de inyectar una nueva carga de combustible: aumentos libres, sin límites en cuotas de colegios privados. Traducido en buen romance, esto significa tarifazos.

Esto surge luego de que el gobierno nacional habilitara a las entidades educativas privadas de todos los niveles a fijar el precio de sus aranceles mensuales sin límites. Javier Milei dispuso la derogación de 69 normas que, según el ultraderechista, "obstaculizaban las relaciones comerciales entre ciudadanos y promovían un rol intervencionista del Estado". Entre ellas se derogó una norma que regía desde 2019 por la cual los colegios privados debían comunicar sus estructuras de costos a la Secretaría de Comercio, que en función de un análisis permitía o no los aumentos.

Quienes se mostraron satisfechos con la decisión del presidente fue la Asociación de Institutos Privados de la Provincia de Buenos Aires (AIEPBA), al asegurar que las disposiciones de la Secretaría de Comercio, que antes de la llegada de la ultraderecha tenía el rol de actuar como una suerte de balanza para controlar excesos empresariales, constituye una medida “burocrática y un trámite inútil que no aporta ningún beneficio al funcionamiento de las instituciones educativas”. Se refieren a la disposiciones resolución 678/99 que ordenaba y regulaba, entre otras cuestiones, las cuotas escolares.

“En contextos inflacionarios como el que registra en los últimos años nuestro país, resultaba difícil de prever el monto anual de las matrículas y constituía una tarea engorrosa para los responsables administrativos de los colegios”, expresaron desde AIEPA. El secretario ejecutivo de AIEPBA, Martín Zurita, confirmó que en la reunión los responsables de la repartición nacional se comprometieron a dejar sin efecto esa decisión que tiene 25 años de vigencia.

“Los colegios tendrán que seguir notificando el valor de las cuotas y los costos del servicio a cada una de las jurisdicciones provinciales y a las familias, pero ya no deberán cumplir con ese trámite engorroso que todos los años exigía la Secretaría de Comercio de la Nación”, explicó Zurita.

De este modo, a las quejas de no pocos padres que vieron incrementar la cuota en diciembre (inscripción) acompañando la inflación estimulada por el nuevo gobierno, temen que en marzo los valores de las mismas se disparen hacia el lado del tarifazo.

El agravante, dentro de este contexto nacional, es que así como las cuotas escolares dañan la paz familiar, no menos grave resulta la escalada de precios en materia alimentaria y demás servicios. En tanto, el salario continúa muy por debajo de las necesidades familiares. Sucede que el actual modelo político, al liberar la economía -los países serios no incursionan por esta senda, este no es un dato menor- deja desprotegida a la gente de bien, a los que trabajan y producen de verdad, en este caso, a los papis.