Milei genuino: estafador, intolerante, autoritario y violento aplaudido por "ensobrados" y "soretes"

El primer mandatario, durante la apertura de Sesiones Ordinarias, volvió con el relato oficial, falseando números y agrediendo a opositores y, en particular, al radical Facundo Manes. Cargó nuevamente contra el peronista Kicillof.

Fue un Milei genuino. Perversamente genuino. Un presidente, estafador, intolerante, autoritario y violento. Así se desprende de cada una de sus expresiones y palabras emitidas al momento de iniciar la Sesiones Ordinarias (período 143) del año legislativo 2025 en el Congreso de la Nación. Se presentó en un Congreso vallado en las inmediaciones y en un ámbito donde no se permitió el ingreso de la prensa. Sólo militantes rentados de la Libertad Avanza que cubrían los principales balcones y espacios del Congreso. Y sin la presencia de más de la mitad de los legisladores que, en un acto de coherencia y a modo de repudiar el autoritarismo y violencia institucional, optaron por dejar vacías las bancas.

Durante casi una hora y media golpeó varias veces su atril, prometió una nueva negociación con el FMI, más despidos y eliminación de áreas estratégicas del Estado.

Mientras el país atraviesa una severa crisis económica que se traduce en caída de consumo, despidos masivos, cierre de industrias y comercio, y la capacidad productiva instalada no logra salir del 60% de actividad, el primer mandatario volvió a montar un falso relato en el Congreso. Nada dijo sobre la estafa internacional en criptomoneda que lo tiene como imputado; ampliar nota en nuestra Web: Investigación internacional

Un congreso donde "ensobrados" y "soretes", términos muy usados por el primer mandatario a la hora de describir a legisladores, aplaudían, junto a una Corte Suprema claramente cooptada por el poder económico; ver nota ampliada en nuestra Web: Para "MiLey" todo vale. También dieron el presente, seis gobernadores y todos sus ministros.

Durante su larga y conocida argumentación ideológica, el presidente nada mencionó sobre mejora salarial, proyectos educativos, desarrollo productivo y laboral. Tampoco se refirió a Malvinas. Menos aún abordar el abandono que viven jubilados que, además de perder ingresos, el gobierno les quitó medicamentos que pagaron durante toda su vida. Tampoco mencionó, y no se disculpó, a millones de discapacitados que fueron objeto de una seria agresión por parte del gobierno luego de que los catalogaran como “idiotas”, “retardados” e “imbéciles”. Así surgió de una resolución oficial publicada en el Boletín Oficial. Tras el escándalo fueron retirados los términos.

Un primer mandatario que se mostró, al igual que sus seguidores rentados, autoritario y violento. Una vez más puso de relieve teorías y prácticas muy utilizadas por el nazismo: crear un enemigo. Así lo hicieron con gitanos, comunistas y sobre todo con judíos. Será casualidad que otra vez volvió a cargar contra el peronista Axel Kicillof. Durante su relato, el presidente volvió a pedir la renuncia del mandatario provincial: “si quiere resolver el problema tiene dos alternativas: abandonar esa visión abolicionista y castigar a los criminales o correrse del camino y dejarnos resolver el problema a nosotros”. A pesar de que existen otras provincias con índices claramente más altos en materia de violencia y crímenes, el intolerante presidente nada dijo al respecto. La violencia institucional la descarga sobre Kicillof a quien, dicen, no soporta ya que el nivel académico y formación cultural de uno y otro son abismales.

Hablando de violencia institucional, no pasó inadvertida la agresión de la que fue objeto el diputado radical Facundo Manes. Fue violentamente atacado por el asesor Santiago “Billetera” Caputo.

Santiago Caputo es el armador, dicen, de cuanta estrategia mediática y perversa uno pueda leer por redes sociales. Decenas de millones de dólares destina el gobierno para bancar esta estrategia. Sin embargo, el asesor se mostró violento con Facundo Manes luego de que el radical cruzara a Javier Milei en medio de la asamblea legislativa exhibiendo una Constitucional Nacional. Ante el gesto del diputado, el primer mandatario, visiblemente molesto e intolerante, le arrojó lo siguiente: "leéla Manes, te va a hacer bien, supuestamente vos entendés cómo funciona el cerebro y parece que no aprendiste nada", dijo para agregar: "quizás tu versión es con inteligencia artificial y cambia de libertaria a kirchnerista como hiciste vos, Manes".

Ofuscado como bróker financiero que es estafado por un par, Billetera Caputo persiguió a Manes en los pasillos para agredirlo. "Lo que pasó fue un escándalo", dijo Manes, después que el asesor de Milei lo amenazara: "te voy a tirar el Estado encima, hijo de puta, ya me vas a conocer", lo amenazó Santiago Caputo, mientras un asesor suyo le daba dos piñas en el pecho al neurocirujano, que es conocido por su carácter bonachón.

Cuando la máxima autoridad de un país rompe y violenta institucionalidad, agrede y atropella a quien piensa distinto, la naturalización de estos actos está a la vuelta de la esquina. El ciudadano de a pie bien puede considerar que todo está permitido.