Kicillof asume responsabilidades y el estafador las esquiva distrayendo a la gilada

Con una provincia castigada por el gobierno nacional reteniéndole dinero, negándole el envío de fuerzas federales y armando operaciones políticas para degradar al mandatario provincial, el gobernador le pide al primer mandatario responsabilidad institucional.

 “Es un hecho trágico que nos tiene conmovidos y con tristeza: la primera respuesta es el acompañamiento del Estado y el pedido de justicia. Por eso desde el primer momento nos dedicamos a apresar a los delincuentes y los equipos de Justicia y Seguridad acompañaron a las familias en su dolor”, afirmó este jueves el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, al referirse a la muerte de la niña Kim Gómez, el miércoles pasado. A las pocas horas de estos sucesos, en los pagos de Vicente López, donde gobierna Soledad Martínez, el delito se cobraba otra víctima, Silvia Lepez.

“En este asesinato el principal responsable tiene 17 años, no es un tema de la ley penal juvenil de edad de imputabilidad porque desde los 16 años se pueden aplicar penas”, sostuvo el Gobernador y agregó: “estamos dispuestos a discutir y mejorar estas leyes que son nacionales; pero aún teniendo la mejor ley, el problema es si se aplica mal o no se aplica: uno espera rigor y que se castigue a los responsables. En este caso debería haber estado preso y estaba libre”.

Asimismo remarcó: “algunos usan esto para ganar un voto y lucrar con el dolor, viendo si pueden sacar ventaja, pero se traspasaron todos los límites: son actitudes miserables y lamentables, no vale todo por un voto. Desde la Provincia continuaremos acompañando a quienes sufren y buscando justicia, que es lo que necesitamos en este momento junto a las familias”, agregó.

En tanto, Kicillof subrayó: “Además de no invertir en seguridad, el Gobierno nacional nos quitó 750 mil millones de pesos de un fondo que estaba destinado a ese fin”. “Con esto no quiero quitarme responsabilidades, solo afirmo que nosotros sí trabajamos seriamente en la materia con los recursos disponibles”, añadió.

Por último, el Gobernador remarcó: “cuando ocurrió el Pacto de Mayo invité al Presidente a trabajar en una agenda conjunta y repetí la invitación el 31 de enero: ahora, por tercera vez, invito al Presidente de la Nación a trabajar con seriedad con nuestros equipos de seguridad, para mejorarle la vida a nuestro pueblo. Tengo una responsabilidad sobre 17 millones de bonaerenses, la asumo y espero que el Presidente haga lo mismo”, concluyó.

Sabida es la agresión del presidente Milei sobre la figura del gobernador Kicillof. Celos profesionales y tener un “enemigo a quien destruir” es parte de la alquimia oficial desplegada por los troles que operan a instancias de Casa Rosada. Y pagados, todo indica, con dinero del Estado.

Milei, sobre quien pesa una seria de denuncia judicial, nacional e internacional, por estafa en criptomonedas ( ampliar nota en siguiente link: ESTAFA...) , no conforme con “destruir al gobernador” avanza sobre los bonaerenses. Castiga a la población reteniéndole dinero, negándole el envío de fuerzas federales y armando operaciones políticas para degradar al mandatario provincial.

Por decisión de Milei, efectivos de Gendarmería y Prefectura, que operaba de manera conjunta con la policía de Buenos Aires, ya no se los ve en las calles. La provincia viene reclamando por su presencia al igual que intendentes. Desafortunadamente, por cuestiones de mezquindad política, muchos jefes comunales enrolados en el PRO o la UCR, por cuestiones políticas, no salen públicamente a exigir la presencia de fuerzas federales en sus distritos.

Dentro de este contexto, el intolerante, autoritario y violento primer mandatario salió a pedir la renuncia del gobernador. También solicitó la intervención de la provincia. Detrás de semejante despropósito no existe otra intención que distraer a la gilada. Distraer a buena parte de la población mientras la economía se derrumba, los despidos se acumulan por doquier, el cierre de Pymes y comercio es una realidad señalada por el Indec, y nada indica que la situación vaya a mejorar para el 70% de la población. Mientras tanto, el oro del Banco Central continúa fugado y la timba financiera es el eje central del plan económico.

Dentro de este contexto nacional, buena parte de la oposición no logra articular un discurso y proyecto aglutinador y superador de la degradante y dañina política institucional que profesan las "fuerzas del cielo". Argentina está en el peor de los mundos y bajo un falso profeta que remite a no pocas actitudes y gestos del nazismo. Eso sí, llora en el Muro de los Lamentos.