“Coimas”: el gobierno acusa a la oposición de montar una maniobra
- Editorial Tobel
- 25 ago
- 2 Min. de lectura
Karina Milei y Lule Menem intentan desviar la atención poniendo a la oposición como artífice de una maniobra electoral.

Karina, "El jefe", en el centro de todas las acusaciones
El escándalo e investigación judicial en lo que ha comenzado a denominarse “Coimas Hnos.Milei”, encontró al gobierno confiado en que el escudo mediático y judicial estaban de su lado. A la luz de los acontecimientos, esto no sucedió. Operadores y grupos mediáticos cubrieron las pantallas con el tema. No lo ocultaron. Algunos operadores mediáticos, muy ensobrados por cierto, sólo atinaron a poner al presidente a resguardo manifestando que no estaba al tanto. Todo indica que estaba muy al tanto, tanto como lo estuvo con la estafa del caso LIBRA.
Así como Alejandro Fantino el año pasado le abrió el micrófono al renunciado director de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS), Darío Spagnuolo, y en la oportunidad se dejó entrever que el funcionario tenía cooptada la Agencia por gente de Karina Milei y los primos Menem, Lule y Martín -presidente de la Cámara de Diputados- al solo objeto de controlar las millonarias compras y así derivar un porcentaje (8%) para pagar supuestamente a los funcionarios mencionados, y el gobierno miró para otro lado, en estos momentos intenta practicar lo mismo. En aquel entonces, cabe recordar, así surge de las escuchas que trascendieron, Spagnuolo aseguró haberle comunicado el pago de las supuestas coimas al propio presidente.
Todo quedó en la nada. Peor aún.
Federico Sturzenegger, de los 16 auditores que tenía la ANDIS, desplazó a 11. Uno de ellos está con parte médico. Si las coimas que denunció el exfuncionario se comprueba que son ciertas, la falta de controles responderían al mismo andamiaje. Entre 500 y 800 mil dólares por mes es lo que se recaudaría para la corona.
Frente a semejante escándalo que encuentra al Juez Sebastián Casanello y al fiscal Pablo Picardi avanzando, llamativamente, de manera rápida, el gobierno recurre a viejos manuales: acusar a la oposición de montar una maniobra electoral. Negar, mentir y montar un falso relato son parte del diseño desplegado desde Casa Rosada mientras dirigentes del PRO parecen tomar distancia y restregarse las manos. “De esto se sale con política”, manifestó un encumbrado dirigente del PRO dejando en claro que ésta es la que le falta a Karina Milei.
La principal acusada, Karina Milei, El Jefe, durante un acto proselitista atinó a decir: "estamos dispuestos a dar la batalla, a ir a fiscalizar para que no nos roben más".
Por su parte, Lule Menem, fiel a su ADN, salió al cruce asegurando “burda operación del kirchnerismo”. “Jamás tuve intervención de ningún tipo en las contrataciones”, indicó.
“No puedo hablar ni aseverar nada acerca de la autenticidad o no de los audios que circulan, pero sí puedo asegurar la absoluta falsedad de su contenido”, sostuvo con la lógica de quien se ve acorralado por imperio de la realidad.
Queda claro que la estrategia del gobierno es hablarle a su electorado duro. Temen, con datos en la mano, que el desencanto sea mayor al proyectado y las urnas les de otra mala noticia.












Comentarios