Intenso operativo municipal contra construcciones clandestinas en el Delta

Contundente documento del Consejo Isleño poniendo límite a la voracidad inmobiliaria. Además reivindica la labor municipal a la hora de controlar construcciones ilegales sobre humedales

Sin rodero y cansados de tantas presiones, políticas y empresariales incluidas –locales y nacionales- , el CAPI (Consejo Asesor Permanente Isleño), acaba de emitir un escrito donde dice taxativamente “no al negociado inmobiliario en el delta, defendamos los humedales”. Además, en el escrito dejan en claro que si hay un aliado detrás de la defensa que sostienen, es el municipio de Tigre a través de la Dirección General del Plan de Manejo del Delta y la Dirección de Inspección de Obras Particulares. Los operativos que el municipio esta llevado adelante a modo de controlas construcciones clandestinas, va en sintonía con lo que reivindican desde el CAPI.

El escrito que al cual accediera Lo Nuestro, y que tienen entre otros defensores e impulsores de todo lo vinculado al cuidado responsable del Delta a Luis Cancelo, detalla que “la zona de frente de avance del Delta, en la desembocadura al Río de la Plata, es el área más frágil del humedal porque es la zona en formación y crecimiento de las islas. Son pajonales, juncales y montes en formación”. Además, el escrito que es acompañado por un variopinto espacio vinculado al cuidado responsable del medio ambiente, recuerda que esta zona es reconocida por el Plan de Manejo Integral del Delta “como zona de protección ambiental, parte del patrimonio natural y cultural de las islas y sus habitantes históricos”. Mientras esto transcurre, desde el gobierno nacional y a través del Ministerio de Medio Ambiente, que preside Juan Canandié, se está impulsando una ley nacional que proteja humedales como los del Delta. Sector, este, muy esmerilado y dañado por el avance inmobiliario ya que, la falta de una adecuada legislación termina favoreciendo emprendimientos que dañan la madre naturaleza tal cual describen diversos sectores.

Para detener esta privatización del bien común y revertir los daños ambientales ocasionados, la Dirección del Plan de Manejo está desarrollando un operativo de investigación, inspección y clausura. Hasta el momento se realizaron 30 clausuras a obras clandestinas en Río San Antonio y Arroyo Anguilas. La medida se determinó de acuerdo con la ordenanza 1101/90 en la aplicación del código contravencional municipal. La clausura se efectuó a instancias de la Secretaría de Gobierno, la Dirección General de Plan de Manejo del Delta, Inspección de Obras Particulares; en conjunto con el Centro de Operaciones Tigre (COT) y Policía de Islas de la sección de Arroyo Capitán.

Finalmente y a modo de apoya una coherente política en la región delta, desde el CAPI dicen apoyar las acciones instrumentadas desde el ámbito municipal, por caso, “proteger el humedal como bien común natural, así como las formas isleñas de hábitat y producción que coexisten con los ritmos del humedal” y no deja pasar la oportunidad para denunciar “el negociado del sector inmobiliario que privatiza un área que es patrimonio natural y cultural isleño”.

Detrás de las denuncias del CAPI, evidentemente subyace una disputa por el control administrativo para determinar en manos de quién debería quedar sancionar este tipo de atropello.

Entre los que adhieren al escrito del CAPI se ubica: Asamblea Delta y Río de la Plata, Biblioteca Popular Seamos Libres, Centro Comunitario Casa Puente, Control Ciudadano Delta, Cooperativa Isla Esperanza, Igarapé Delta. Cooperativa, Isleñxs en Lucha, Observatorio de Humedales, Origen Delta, Unidad Isleña, Unión Islera Vecinal y Plaza La Paloma