Lanús “le roba” a Lollapalooza 200 palitos y abre una nueva fricción con el possismo
En concepto de Tasas que, al decir del intendente, la anterior gestión no “cobraba lo que correspondía”
El intendente Ramón Lanús acaba de perpetrar un robo: le cobrará a la empresa organizadora del megafestival internacional, Lollapalooza, cerca de 200 millones de pesos en concepto de Tasas. “La Municipalidad va a cobrar lo que corresponde”, reza el comunicado de prensa oficial. Si no cobraba lo que correspondía ¿fue por ineptitud administrativa o manifiesta connivencia con los empresarios?. Una u otra situación ameritarían, en un funcionario serio que alienta la transparencia administrativa, un detallado informe al respecto.
La postura del municipio fue leída como un tiro directo al anterior gobierno, el de Gustavo Posse, con el que ha comenzado a tomar distancia. Por lo menos en lo discursivo. Esto se vio claramente expuesto al momento en que el intendente ultramacrista diera paso al discurso de apertura de sesiones ordinarias en el Concejo Deliberante. En dicha oportunidad señaló la “pesada herencia” y las "desprolijidades administrativas” que dejaron un agujero financiero de miles de millones de pesos, según lo expresado. Esto cayó como balde de agua fría en el possismo. “Esto no se lo vamos a dejar pasar, tiempo al tiempo”, comentaba un concejal que responde al radical Gustavo Posse, un verdadero tiempista en términos políticos. Ahora, Lanús -ex presidente de AABE, y el mismo que como concejal le votó a Posse la Rendición de Cuentas-, aquel que intentó vender el Golf de Villa Adelina, carga sobre su antecesor con lo no cobrado a Lollapalooza. En tren de especulaciones, no son pocas las que dan cuenta de un Gustavo Posse armando y trabajando para regresar en el 2025. Tema este que merecerá una columna especial en otra entrega.
“Luego de conversaciones entre la Municipalidad de San Isidro y la organización del festival Lollapalooza, queremos dar la buena noticia de que se ha llegado a un acuerdo y se va a realizar el evento. Los organizadores pagarán las tasas indicadas en la ordenanza fiscal, lo que permitirá al Municipio cubrir los costos asociados a la prestación de servicios municipales durante el festival. En este sentido, la Municipalidad recaudará un mínimo de 200 millones de pesos. Es un gran honor recibir a un festival de este nivel”, expresa el comunicado de prensa emitido por el municipio al cual tuvo acceso Lo Nuestro.
De este modo, el nuevo intendente abre un nuevo frente de disputa política. Así como logró generar una relación ríspida con el Sindicato de Trabajadores Municipales que conduce Omar Arce, también tiene no pocas críticas de proveedores por el considerable atraso en el pago de facturas. Y ahora con el possismo, del cual necesita de sus manos en el Concejo Deliberante. También con los desquiciados libertarios, y el propio intolerante y autoritario presidente que considera que “cobrar impuestos es un robo”. Milei no cree en el Estado, en la soberanía nacional -por eso desdeña de Malvinas-, en la industria local, en la educación pública, en la solidaridad; no cree en la gente de bien, la que trabaja estudia, produce. El fundamentalismo que profesa, anarcocapitalismo, no tiene estos principios en agenda.
