Increíble, ¿el gobierno le roba a la clase media sus ahorros en dólares?
Producto de la crisis, millones de personas, para llegar a fin de mes, deben echar mano al “canuto”. Un horizonte nefasto que incrementa el desánimo de un electorado que confió que la lucha era contra la casta.
Era impensable. Lo votaron, con la lógica del caso, para castigar a la casta. Nunca imaginaron que la casta serían ellos; hoy, los más castigados. Ese gran batallón que por bronca, odio, impotencia, frustración, promesas incumplidas o por no ver más allá del propio ombligo, en estos momentos se ven seriamente afectados.
Son millones de personas, clase media, comerciantes, PyMes, profesionales, monotributistas, entre otros, que a partir de una increíble devaluación como nunca antes se había visto, 118%, sumado a la liberación de precios -prepagas, celulares, colegios y varios etc. más-, hoy no llegan a fin de mes. Otros se ven obligados a despedir personal para mitigar la caída de ventas, que según CAME (Confederación Argentina de la Mediana Empresa) supera el 30%. Cifra similar tuvo la recaudación del IVA que define nivel de actividad: semejante baja habla de la gravedad de la situación.
En un relevamiento realizado por este medio en casas de cambio de la Zona Norte, donde la fila de gente es notoria, los gerentes, todos, coincidieron que son más los que venden que los que compran. «Te cansás de ver gente muy bien puesta, que te hace pensar que no tendría problema de efectivo, y así y todo están vendiendo sus dólares», comentaba uno de los gerentes consultados.
Y agregó: «sin temor a exagerar, 7 de cada 10 personas que llegan al local lo hacen para vender
Mientras esto sucede, el deterioro avanza a pasos agigantados. Y el gobierno continúa con el falso relato de que logró parar una inflación del 15 mil por ciento -mentira absoluta- cuando en la realidad la potenció a partir de un modelo ideológico -anarcocapitalismo- que ningún país utiliza, sólo lo intentó la inglesa Liz Truss, primera ministra que duró tan sólo 60 días. Fue eyectada por pretender introducir medidas más leves que las de Milei. En el Reino Unido, al igual que en Argentina, los sectores medios fueron los más dañados por las políticas de Truss.
El presidente Milei, en connivencia con sus socios del PRO y un par de algunos gobernadores del peronismo, se ufana de que el Banco Central lleva acumulado poco más de 7 mil millones de dólares. Dólares que, en su mayoría, provienen de la venta de ahorros que la clase media se ve en la necesidad de vender para llegar a fin de mes. Calladamente, y con la pesadumbre de ver cómo sus esfuerzos (ahorros) se les escurren de las manos, pierden sus ahorros de la misma manera que lo perdieron en el 2001.
Daño por partida doble. Por ver que el presidente les mintió, que la casta son ellos, y por sufrir, una vez más, cómo les roban sus ahorros, en este caso, en nombre de la libertad.
