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Tigre: la candidatura de Massot sacude y promete hacer implosionar a Juntos por el Cambio

Desde el Frente de Todos miran, por ahora, con cierta ingenuidad


Por: Tano Armaleo.-La candidatura a la intendencia de Tigre de Nicolás Massot no está oficializada, sin embargo, el operativo instalación mediática ha asomado. Las primeras pinceladas dadas en medio afines al marcismo, sugiriendo que el actual director del banco Ciudad de Bueno Aires se encuentra macerando su candidatura, hizo que se encendieran las primeras luces de preocupación en Juntos por el Cambio; nacional y local. Por lo pronto, en Tigre, quien más alarmado se encuentra es el concejal Segundo Cernadas, actual presidente del HCD, quien no oculta su ambición de ser candidato en el 2023. El ex diputado nacional, tras la derrota electoral del 2019, se ubica en la vereda de enfrente de Mauricio Macri. Massot no ahorra críticas hacia quien fuera su jefe y referente político.


Quien supo ser presidente del Bloque del PRO en la Cámara de Diputado durante el gobierno de Cambiemos, no es un libre jugador en las arenas de la compleja interna por la que transita Juntos por el Cambio. Está alineado detrás del tándem que integra Rogelio Frigerio y Emilio Monzó. Ambos dirigentes, además de tener algunas tibias críticas sobre el anterior gobierno, coinciden en que Macri “cumplió un ciclo”. En esta saga, comulga Horacio Rodríguez Larreta y su mejor alumna: María Eugenia Vidal. Si bien Vidal y Monzó tienen una rivalidad que proviene de vieja data, la necesidad de cerrar filas a fin de enfrentar a los “fundamentalistas” de Juntos por el Cambio -Mauricio Macri, Patricia Bullrich, Waldo Wolff, Ernesto Sanz, Rodolfo Cornejo, Mario Negri, entre otros-, ha llevado a relegar cuestiones personales. Es dentro de este marco donde Nicolás Massot se mueve.


La intención de enviarlo a jugar Tigre no es casual. La primera intención es tratar de ordenar el frente interno que tiene en plena ebullición a Juntos por el Cambio y al bloque de concejales. Así como Cernadas, que responde a Patricia Bullrich, tiene ambiciones, no muy distinto le sucede a la concejal Ana María Fernández Costa ligada a Horacio Larreta. En el imaginario político consideran que Nicolás Massot, que en realidad más allá de ser vecino de un coqueto y selecto barrio privado y tener una buena relación con Sergio Massa, poco y nada conoce de Tigre, bien podría ser el catalizador que termine por sellar una unidad en Juntos por el Cambio. Todo indica que esta jugada no sería una decisión del propio Massot. La definición estará en manos de Larreta, Frigerio y Monzó. Mientras tanto, lo que aventó Massot como primera reacción en Tigre fue un natural rechazo.


Lo cierto es que el panorama político en Tigre, donde la interna entre el denominado zamorismo y massismo está sobre tablas, puede ser un gran aditivo para Juntos por el Cambio. Con un distrito en que la nueva sociología electoral surgida a partir de los innumerables barrios cerrados juega, en buena proporción, a favor de Juntos por el Cambio, el Frente de Todos no podría minimizar una candidatura como la que impulsan desde CABA. Si de verdad el peronismo quiere retener la intendencia debería tomar cuenta de esta movida. Y comprender que Nicolás Massot podría constituirse en un buen candidato para los barrios cerrados; donde también abreva, en menor cuantía, el Frente de Todos. No habrá que perder de vista que muchos de esta nueva camada de vecinos tienen aspiraciones sociales al punto que intentan borrar sus orígenes. Pretenden ser parte de la mesa de Mirta Legrand.

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