Camino electoral sin plata en los bolsillos y con un futuro incierto
- Editorial Tobel
- 7 ago
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Más de 13 millones de personas están en condiciones de votar entre dos modelos claramente opuestos. El que ofrece LLA-PRO y la del resto del arco político que, con sus más y menos, nada quiere saber con el autoritarismo y maltrato institucional. Gabriel Katopodis (Fuerza Patria), Diego Valenzuela (oficialismo) y Julio Zamora (Somos Buenos Aires), los candidatos que más suman.

Por: "Tano" Armaleo.- La crisis socio-económica es irrefutable. Datos del INDEC y entidades como Unión Industrial, Cámaras de Comercios y de la Industrias Pymes Argentinas, entre tantas otras más, reflejan, con datos en la mano, la fatiga del modelo político que impulsa el gobierno de La Libertad Avanza en concordancia con el PRO y la UCR. Los bolsillos del ciudadano de a pie, del que produce y trabaja están enflaquecidos. Y nada indica que esto se revierta. Lo pronostican economistas como Carlos Melconian, Roberto Cachanovsky y Carlos Rodríguez. Sin embargo, la mayor crisis es la de valores. El mundo observa azorado cómo el presidente insulta, maltrata, degrada al que piensa distinto y gobierna con un alto grado de violencia y autoritarismo institucional. Y, extrañamente, un sector de la población aplaude y naturaliza lo que muchos definen como el “goce de la crueldad”. Celebran la crueldad. Es el vale todo.
Si la máxima autoridad de un país insulta y agrede y además alimenta el odio y es aplaudido, en este contexto, que un niño maltrate a la docente, por ejemplo, o insulte a un policía podría ser tomado como algo natural. Desafortunadamente es lo que sucede.
Será, dicen no pocos sociólogos, una elección en la que el odio y la bronca estarán presentes en las urnas el próximo 7 de septiembre. Odio expresado por quienes reivindican el modelo de La Libertad Avanza y el PRO. Y un voto bronca de quienes se sienten distantes del relato oficial. O con todo el andamiaje político en general. También se producirá el denominado “voto oculto” generado por aquellos desencantados con el gobierno que, ante acontecimientos objetivos, no se sienten reflejados. Aplican el sentido común, migran con su voto hacia otros horizontes. Tienen la intención de que el gobierno acuse recibo de que las cosas no funcionan como lo había prometido: ellos se sienten víctimas del modelo y no beneficiarios.
Dentro de este contexto nacional, más de 13 millones de bonaerenses podrán concurrir a las urnas. Se eligen senadores provinciales, concejales y consejeros escolares. Tal como indica el documento elevado por la Junta Electoral, el padrón de argentinos para las elecciones 2025 en la provincia de Buenos Aires tiene 13.361.359 votantes, que están repartidos en las Ocho Secciones. Esto se traduce en 250.591 sufragistas más que la lista de los comicios bonaerenses del 2023.
En lo que respecta a la Primera Sección electoral, que abarca toda la gran región norte, se elegirán senadores provinciales, concejales y consejeros escolares.
Para esto podrá inclinarse por las siguientes alternativas políticas:
Fuerza Patria: Gabriel Katopodis (senador)
LLA: Diego Valenzuela (senador)
Somos Buenos Aires: Julio Zamora (senador)
Frente Potencia: Félix Lonigro (senador)
FIT-U: Romina del Plá (senadora)
Nuevo MAS: Lucas Correa (senador)
Unión Liberal: Eduardo Bisognin (senador)
Política Obrera: Pablo Busch (senador)
Si bien algunos entienden que la disputa electoral estará centrada entre el oficialismo y Fuerza Patria, que en la regional tiene a Gabriel Katopodis como primer candidato a senador provincial y a Diego Valenzuela por el lado de la ultraderecha (LLA-PRO), ese votante que se siente defraudado por Milei estaría buscando una tercera vía.
Todo indica que esta alternativa estará centrada en Somos Buenos Aires. Espacio donde conviven radicales, peronistas, gente de la Coalición Cívica, del randazzismo, de Pichetto, de Schiaretti y del GEN (Stolbizer).
El intendente Julio Zamora encabeza la lista de Somos Buenos Aires. Una alternativa electoral que se presenta como distante del modelo “para pocos” que propone el gobierno y de la impronta que ofrece Fuerza Patria.
Si bien todos los relevamientos indican que el peronismo que se expresa a través de Fuerza Patria, junto a otras expresiones políticas, lidera las elecciones, el tema a descifrar es el porcentaje de votos que podría sumar Somos Buenos Aires. Por lo pronto, la mayor certeza es que el 7 de septiembre habrá elecciones en un contexto nacional con bolsillos flacos y empresas y comercios que deben cerrar, médicos, científicos y jubilados mal pagos, insultados y maltratados. La otra certeza proviene, así parece, del bajo nivel de votantes que podría registrarse.













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