top of page

Maldita herencia: de un San Martín tecnológico, al de garantizar un plato de comida para 100.000 per

El intendente Fernando Moreira se reunió con representantes de los 180 comedores.

Así como San Martín marca rumbo en materia de desarrollo tecnológico y cientifico en cuanto a lucha del COVID se refiere, lo propio realiza en materia social inclusiva. Una clara muestra es la coordinación y acción conjunta que despliega el municipio junto a una red de 180 comedores diseminados a lo largo y ancho del distrito. Si la herencia macrista sumo a más de 300.000 personas sin trabajo, miles de comercios cerrados (35.000) y Pymes (26.000) fundidas, y un país desbastados, esto tiene rostro: los miles de comedores y merenderos que se abrieron para garantizar un plato de comida. La pandemia potenció todo. Al respecto, y en relación a los comedores y merenderos, el intendente Fernando Moreira mantuvo un nuevo encuentro con representantes de los 180 comedores.Pensar que San Martín supo ser la Capital Nacional de la Industria. La primera estacada la recibió de parte de Carlos Menen, la mortal provino de Cambiemos.

Para tomar dimensión de que significa una población que fue condenada y confinada a la pobreza desde hace varias y varias década, solo que Cambiemos la multiplico, vale mencionar que, sólo en San Martín, más 110 mil personas reciben asistencia municipal y de comedores y merenderos comunitarios. Muchos de estos comedores son mantenidos gracias a la acción de la población dentro de un trabajo conjunto con la Iglesia, por caso el Padre Pepe Di Paola, sectores del sindicalismo, y movimientos políticos.

La oportunidad también dio lugar para la entrega kits de seguridad con camisolines, máscaras, barbijos, alcohol, cofias, delantales y otros insumos de prevención ante el Coronavirus.

Durante la jornada, junto al Secretario de Desarrollo Social, Oscar Minteguía, entregaron kits de seguridad con insumos de cuidado y limpieza, y conversaron con representantes de cada espacio, en el Centro de Cuidado Infantil Tren Blanco, en La Carcova donde realiza el trabajo pastoral el Padre Pepe.

Al encuentro asistieron los responsables de los 13 comedores del barrio y las referentes de dos espacios emblemáticos: el comedor Rincón Feliz, de Billinghurst, y de Flor de Loto, de Villa Hidalgo. Los demás espacios que forman la red participaron por videoconferencia, para evitar traslados en el marco de la pandemia.

Moreira dijo: “estamos agradecidos con todas las personas que están en cada uno de los comedores y merenderos por su enorme compromiso con quienes más lo necesitan”. Y agregó: “El rol social que cumplen en los barrios es clave para seguir comunicando a las familias las medidas de seguridad. La enfermedad todavía no pasó y tenemos que seguir trabajando para pasar lo más rápido posible esta situación”.

Los kits de seguridad, que se seguirán entregando a cada comedor, incluyen máscaras de protección, barbijos, camisolines, delantales con cofias, alcohol, lavandina, jabón y otros insumos para enfrentar la pandemia. Algunos de estos productos son confeccionados por cooperativas de trabajo de la ciudad.

Además, otra cooperativa local realiza las tareas de limpieza y desinfección en cada uno de los comedores de manera mensual.

Por su parte, Minteguía agregó: “Las organizaciones sociales son las más autorizadas en este contexto para decirle a los vecinos que nos tenemos que seguir cuidando para atravesar esta etapa”.

Cabe recordar que desde el inicio de la pandemia, el Municipio incorporó otros 60 establecimientos a la red de comedores y merenderos, que ya son 180. Además, se entregan alimentos a 34 clubes de barrio y sociedades de fomento que preparan viandas solidarias, con la colaboración de más de 300 voluntarios.

WhatsApp Image 2024-09-17 at 17.32.10.jpeg
bottom of page