Crisis, al límite de la fractura, en CGT Zona Norte
Cuestionan al actual Secretario General por tomar actitudes personales e inconsultas
Por. Tano Armaleo.- Tal cual adelantáramos en notas anteriores, la CGT Zona Norte está al borde de una nueva fractura entre los dirigentes. El punto de discordia es el ungido Secretario Gral. de la CGT, el ferroviario Roberto Lovaglio. No es una disputa por las ideas o proyectos políticos. Interesante sería ver una contienda que tenga como centralidad a los y las trabajadoras que por estas horas sufren la amenaza generada por la pandemia. Una amenazad que -además de la crisis dejada por Cambiemos, por cierto,- promete llevarse cerca de 150.000 despidos y más de 25.000 Pymes y comercios. Sólo la claras y acertadas medidas peronistas instrumentadas por el gobierno nacional –aún con todos lo que falta y yerros estratégicos cometidos- , está logrando que la caída no sea tan estrepitosa. Cuidar la salud y la producción, ha sido la clave que ha permitido que los muertos no se acumulen de a miles diariamente.
A pesar del complejo panorama, desde la oposición, expresada por Cambiemos, insisten en socavar las medidas; todas. Si el gobierno necesita una apoyo claro, la tirantes dentro de la CGT Zona Norte no hace un grato favor.
Los “gordos” de la CGT están muy inquietos porque Lovaglio se corta sólo, se ha montado en un estandarte publicitario al mejor estilo PRO, se mente en los distritos sin respetar y consultar a las bases, son algunos de los cuestionamientos que se escuchan entre la dirigencia gremial zonal.
“En el día de la fecha y después de compartir años de lucha con los compañeros de la CGT Zona Norte y advirtiendo cambios en el concepto por la cual fundamos la misma, y considerando que en favor de la unidad, es mejor dar un paso al costado, el Sindicato de Panaderos de San Isidro y V. López pone a disposición del Secretario General su renuncia”, es el escrito presentado a las máximas autoridades gremiales regional. Malestares similares se recogen en FOETRA, UPCN, Camioneros, y SADOP, entre otros gremios. Si bien no han salido públicamente a cuestionar a Lovaglio, en la intimidad “desconfían de la lealtad del compañero”. Lo catalogan como personalista y avanzar de manera inconsulta. Si bien la lealtad y traición son las dos caras de una misma moneda, el tema es la dosis que le aplican algunos.
En tren de cuestionamiento, no le perdonan a Lovaglio que se meta a tallar en las internas del PJ-Frente de Todos de San Isidro y Vicente López. Su reciente abrazo con el ex concejal Lorenzo Beccaría quien “dejó de lado acuerdos públicos de ética política y conducta militante” al sólo efecto de poder presentarse como candidato a intendente en el 2019, terminó por potenciar la bronca de dirigentes de Vicente López. Ahora, el secretario Gral. de CGT estaría acompañando al ex edil de Vicente López como candidato a concejal para el 2021. Dirigentes como Carlos Ruggero (FOETRA) al igual que la concejal y dirigente sindical de UPCN Marcela Cortiellas, son el rostro visible que sintetizan a su modo y sin hacerlo de manera pública, la bronca con la actual conducción cegetista. No muy distinta es la postura de la concejal sanisidrense Milena Lamonega , enrolada en el gremio de SADOP, cutosecretario Gral, es el docente José Luis Casáres de fuerte predicamento gremial.
Hace poco más de un año, Lovaglio llegaba a la actual conducción regional con el apoyo de los nombrados y de tantos más. Hoy pareciera que aquel aliento se desvanece. El engordado podría ingresar a un régimen estricto. Y no se descarta que otros gremios, como Bancarios, UOM y municipales, podrían plegarse en la dieta para “buscar una conducción que, de verdad, represente los intereses de las y los trabajadores”/
En medio de una compleja situación nacional producto de la pandemia y cuando se impone que quienes tienen responsabilidades política, social, gremial o empresarial, se pongan a pensar políticas activas que ayuden al gran esfuerzo que está realizando el gobierno nacional, volcando cerca del 5% del PBI para sostener el país, actitudes como las que se plantean en CGT Zona Norte, no hacen más que engordar y alimentar el descredito.
