Julio Zamora salió al cruce por críticas sobre medidas municipales
Producto de la pandemia el municipio reformuló partidas presupuestarias y dejó sin efectos contratos
Foto: Las inversiones municipales priorizan la lucha contra el corona
“Nos cuesta mucho entender la actitud mezquina de algunos sectores que ven la oportunidad para plantear que nuestras medidas son de ajuste. Estoy convencido de lo que estoy haciendo, creo que la gran mayoría de la familia municipal lo entiende y, sobre todo, lo entienden los vecinos, que son a quienes debemos darle respuestas todos los días. Acá no tiene que haber lugar para ventajas que no le hacen bien a nuestra sociedad”, de este modo salió el intendente Julio Zamora luego de que sectores políticos, opositores y cercanos, y del sindicato de trabajadores municipales quienes cuestionaron algunas de las medidas tildándolas de “ajuste”.
Ante la situación planteada en el distrito, el intendente peronista explicó que “nuestra gestión ha tomado medidas de austeridad que tienen como objetivo garantizar la prestación de los servicios básicos en todo el distrito, como la salud en el marco de la pandemia, la seguridad ciudadana, los servicios públicos como recolección de residuos o limpieza, y la asistencia social a los más vulnerables”.
“Tras el anuncio del Presidente Alberto Fernández –dijo el jefe comunal- del comienzo de la cuarentena, decretamos la emergencia económica en el distrito por 90 días, con el objetivo de readecuar las partidas presupuestarias para darle prioridad a las áreas de Salud, Seguridad y Desarrollo Social. Reduje mi salario en un 50% y también el del secretario General y de Economía. Achicamos la estructura orgánica del Municipio, eliminando dos secretarías y cinco agencias, redujimos entre un 25% y un 50% el salario de los funcionarios, y decidimos no renovar un 25% de los contratos tercerizados relacionados con espacios verdes, vigilancia privada e iluminación”.
De acuerdo con las explicaciones brindadas por Zamora, las medias tuvieron como eje priorizar la lucha contra el COVID 19 sin que esto implique descuidar y desatender al sector productivo, industrial, comercial y laboral. Al respecto, recordó que desde el ámbito municipal se invirtió en la creación del Centro de Aislamiento de Emergencias, de 11.000 metros cuadrados y con capacidad de 500 camas, para albergar a los pacientes leves de COVID-19.
“Readecuamos el Hospital de Benavídez para convertirlo en un centro especializado en coronavirus, con la incorporación de 10 camas de terapia intensiva de alta complejidad y otras 20 de mediana y baja complejidad. Además, comenzamos la remodelación y mantenimiento del Hospital Provincial de General Pacheco, que venía de muchos años de abandono” añadió el intendente.
Ingresando al tema reducción salarial, confió que “a aquellos empleados que actualmente no están cumpliendo sus tareas normales y habituales, como el personal vinculado a áreas no esenciales como deporte, cultura y otras, les hemos reducido el adicional de productividad. Son medidas no deseadas pero que hemos tenido que tomar por la gravedad de la situación económica que estamos atravesando, con una caída del 40% en la recaudación y de un 33% en la coparticipación que recibimos de la Provincia”. Las medidas del jefe comunal, en algún modo va en sintonía con la baja salarial acordad entre la cúpula de la CGT y la UIA: reducción salarial entre un 25 y 30%. Llamativamente, el gobierno de Alberto Fernández, vía Ministerio de Trabajo, homologará este tipo de convenio producto de la crisis que genera la pandemia. Obvio, la pregunta del mundo de trabajo es: si somos socios en las pérdidas, lo seremos también en las ganancias?”. Empresa como Techint, Grupo Clarín, Telecom, Mercado Libre, por casa, que han denunciado ganancias superlativas en millones de dólares hoy aplican reducción salarial, pero nada dicen a la hora de distribuir riquezas.