Vidal mandó al aparato partidario llenar la Plaza de Morón
Para festejar el cumpleaños, romper lanzas con Macri y dar comienzo al "visalismo". Giño de la gobernadora a intendentes PRO para que utilicen la tijera en octubre y así garantizar el triunfo distrital.
Foto: Vidal,Tagliaferro, Alex Campbell
Si la necesidad tiene cara de hereje, la gobernador Vidal pareciera tener dicho rostro. Dejando de lado muchos preconceptos y parte de la ideología con la que ha conquistado oportunamente la provincia de Buenos Aire, ahora (Vidal) se inclinó por lo más caro del populismo: estar cerca de la gente, abrazarlas mientras las cámaras de TV toman la impronta. Así quedaba demostrado el pasado fin de semana (domingo), cuando cerca de 3.000 personas motorizadas por la dirigencia PRO de Buenos Aires, aquella que responde fielmente la mandataria provincia, fueron movilizadas a la plaza de Morón para festejar su cumpleaños, 46.
Frente al palacio municipal que administra el Ramiro Tagliaferro (ex esposo de la gobernadora) y bajo carteles que decían “no estás sola”, la jugada política tuvo como norte mitigar la estrepitosa caída electoral; y sobre todo marcar el comienzo de una campaña electoral diferenciándose seriamente de Mauricio Macri. Comienza a construirse el vidalismo, era el coro de algunos de los colaboradores que frecuentan la intimidad de la dama PRO. Tanto que, es la propia gobernadora quien habría sugerido a jefes comunales que aún le responde, repartir boletas electorales con los Fernández y Kocillof-Magario y el candidato a intendente de Juntos por el Cambio. Valenzuela, Ducotte, y Molina, por caso, podrían ser parte de dicha alquimia.
Por lo pronto, y más allá si los corte de boleta se llevan adelante, lo concreto es que el matrimonio Macri-Larreta-Vidal, está roto. Sí continúan Larreta y Vidal en la misma senda,.
“Gracias por todo este amor. Es el amor que me voy a quedar siempre y es el amor que sostiene esta provincia”, manifestaba la gobernadora a los que fueron movilizados por el aparto del vidalismo: funcionarios, dirigentes políticos, y lógicamente gente de a pie, los menos.
