Jorge Macri ocupará un cargo ministerial
En diciembre
Tras la estocada de la denunciante serial -Elisa Carrió- y en medio de una dura interna dentro del macrismo, y mientras la crisis nacional se agudiza, el intendente Jorge Macri acaba de anunciar que no será candidato a senador nacional por la provincia de Buenos Aires. Siempre de acuerdo con su relato, así se lo anticipó al presidente Mauricio Macri, a Marcos Peña y a la propia gobernadora Vidal, su aliada estrategia. Si bien su candidatura nunca fue oficializada, el hecho que el intendente se haya corrido de la escena electoral podría tener otra lectura; y otros beneficios
En cuanto a la lectura política, no pocos consideran que en estas circunstancias salir a la cancha electoral con el apellido Macri y sin un triunfo garantizado, sería apostar por una jugada muy riesgosa que no tiene garantías de triunfo. Además, en la intimidad del macrismo, más precisamente en la mesa chica de la cual se nutre el presidente -Marcos Peña, Lopetegui, Quintana, y Durán Barba-, no están dispuestos a transitar las elecciones con una Carrió cuestionando y denunciando “a nuestra gente” mucho menos si hay un apellido Macri en juego, así lo trasmitieron en diversas reuniones.
Para comprender lo dicho, habrá que recordar que la diputada nacional viene de acusar a Vidal por sostener al jefe de policía al cual lo objeta -verbalmente, no judicialmente- de proteger a narcotraficantes. Tiro que por cierto, recae sobre el Ministro de Seguridad provincial, Cristian Ritondo. Si estas “falsas” cuestiones molestaron mucho a la gobernadora al punto de tener una pésima relación con la diputada, otro eje de fricción fue cuando cuestionó la precandidatura de Jorge Macri, al cual lo acusó de “corrupto”. Cierto o no, el intendente -que es mucho más hábil que su primo- comprendiendo que la política es una construcción colectiva, optó por autoexcluirse de toda contienda electoral; aún cuando nunca fue oficializada.
Claro que como buen “vendedor de autos usados” o “de humo”, Jorge Macri sabe sacar réditos de las derrotas. La moneda de cambio a su corrida sería la coronación como Secretario de Estado de la Nación. Fiel a los mandatos familiares, su primo le tiene asignado -así lo confirman fuentes cercanas al jefe comunal-, un rol protagónico en materia de obras públicas: construcción de cloacas y red de agua potable en todo el país; Ministerio que preside Frigerio. Jorge Macri sería el encargado de manejar semejante millonada, pero sobre todo, articular política con intendentes de manera directa.
La incursión por la órbita nacional no le exigirá renunciar al cargo de intendente. Su lugar sería ocupado por el concejal “Diego” Enrich, quien no oculta su interés en sucederlo. Una alquimia que seguramente deberá dirimir con la diputada nacional, la ultramacrista Soledad Martínez, que también tiene sus aspiraciones para el 2019. Martínez -que al momento de votar durante la década pedida por el matrimonio igualitario se inclinó por el sí- cuenta con el guiño de Jorge Macri.
